Lunes negro




Después del buen sabor de boca del fin de semana el lunes me levanto con malestar general. Me tomo la temperatura y son apenas unas décimas por lo que decido tomarme algo para aliviar el malestar y decido ir al curro en bus. Cuando llego allí parece que me encuentro mejor pero conforme van pasando las horas voy decayendo hasta que decido irme a casa porque allí no podía hacer otra cosa nada más que enredar. Me voy durmiendo en el bus de vuelta a casa y una vez allí voy directa a la cama, ya comeré después. Tengo muchas llamadas perdidas en el móvil, 'Vaya, parece que todo el mundo se ha puesto de acuerdo.' En concreto hay una llamada que me escama por la hora, a las 17h de mi madre, efectivamente son malas noticias, muy malas noticias. He de colgar, sigo con fiebre y la cabeza como un bombo necesita procesar la información. Muchas sensaciones: tristeza, sorpresa, abatimiento, rabia contenida, dolor, todas ya conocidas y que aún hoy al recordarlas hacen escapar alguna lágrima.

Paso varios días envuelta entre dolor, pena y malestar por culpa de la dichosa fiebre, lo vivo todo como flotando.

La vida... que puta es.


0 comentarios: