EcoTrail de Paris 80 km. III Parte



... y espero que sea la última, de otra forma pasaré a denominar la crónica con el título de 'Lo que el viento se llevó'.

Con lo que había llovido, los charcos y barro del camino mis calcetines acompañaban mis pasos cantando al son de un pegadizo 'chof, chof'. Tenía que cambiarlos pero pensé que era mejor en el avituallamiento y así lo hice mientras me bebía el primer vaso de coca-cola.

En algo menos de 10 minutos salí pitando de allí, no fuera a ser que alguien dijera en frances eso de... 'Se acaba el tiempo!' y yo me quedara allí, tan pancha. Había tomado algo de queso con galletitas saladas y como no, por lo menos un par de vasos o tres de coca-cola. Todo un puntazo! Hay gente que no puede con las burbujas y a mi la coca-cola me sienta de escándalo. En esos momentos ya hacía por lo menos una hora que había anochecido del todo, y aunque hasta ese momento las zapatillas se habían portado mucho mejor de lo que yo esperaba en las bajadas, los dedillos de mis pies dolían cada vez más. Las zapatillas me están un poco justas y cada vez lo notaba más en las bajadas. Aunque por el momento era soportable, lo que pasara después era toda una incógnita.

Seguía tomando el fost print sport cada tres horas más o menos y además para el segundo avituallamiento me tenía reservado un gel, pensaba yo que ahí empezaría la parte decisiva de la carrera, o al menos la desconocida. Un poco de energía para ir mejor físicamente me ayudaría a que la mente no se me viniera abajo. Al fin y al cabo a estas alturas ya no eran mis piernas las que iban a terminar la carrera, no a menos que la cabeza quisiera, y hasta el momento, iba disfrutando... perfecta!!

Con algo de tristeza me di cuenta que al quitarme la mochila había perdido la funda del vasito que llevaba colgada en la parte superior de la mochila que cae en el pecho, jó :(... Que se le va a hacer, tenía claro que no iba a volver a por ella. Por delante se supone que tenía 17 kilómetros y digo se supone, porque haciendo los cálculos desde el km 53 del avituallamiento 2 hasta los 73 km del avituallamiento 3 eran 20 kms!! Además de lo que yo recordaba como una zona de 'subebajas' con una gran cuestaca por el medio. Pues al lio, mejor no pensar.

Había ido cortando y poniendo el cronómetro en cada avituallamiento desde cero así que... no tenía ni puta idea de la hora que era. Es más, prefería no saberlo. La relación espacio-tiempo aparecía distorsionada, como si fuera de esos caminos no estuviera pasando nada, como si todo se hubiera detenido. Parecía que hacía días desde que salimos de Saint Quentin-Yvelines y semanas desde que dejarámos a Julia. A diferencia que en otras ocasiones no iba pensando en nada ni nadie en concreto. Bueno, si que me acordaba en algunos tramos de mis compis, ¿por dónde estarán? ¿cómo les estará yendo?, ¿habrán llegado ya? y de vez en cuando flashes de personas o sucesos, pero básicamente estaba concentrada en lo que estaba haciendo. De disfrutar de las buenas sensaciones a pesar de todos los aparentes impedimentos que se iban sucediendo. Pendiente de mí, nada más... y nada menos.

El bosque estaba completamente a oscuras, tan sólo se veían balizas reflectantes que aparecían salpicadas en los árboles de vez en cuando, cuando levantabas el frontal. Había momentos en los que el camino era sinuoso y ni siquiera se veían 'luces compañeras' a lo lejos. Mi único campo de visión era el círculo luminoso que proyectaba mi frontal, pero podía percibir la altura de los árboles y sobre todo y a pesar de la oscuridad una gran sensación de amplitud. Me sentía pletórica y así seguía, corriendo y corriendo ¿De dónde había salido tanta energía? Quizás de todo lo que había estado tomando que empezaba a hacer efecto. El caso es que me encontraba mejor que en la primera parte del recorrido ¿cómo puede ser? Me encontraba a muchos corredores que habían pasado a ser 'cadáveres'. Iban tirando a duras penas, algunos se notaba que llevaban una gran lucha interna. Yo seguía a lo mío, además me habia puesto el mp3 después de no escuchar nada de música desde el día del avión, y yo sola lo iba flipando en colores. Que bien me lo pasé.

Pajas mentales? puede ser... quizás estas cosas estén hechas para sentirlas y no para explicarlas.

Desde el inicio de la carrera iba haciendo el elástico con otra corredora con la que empecé a hablar en ese tramo, cada una a nuestro ritmo, a veces ella se adelantaba otras veces yo, pero cuando coincidíamos hablábamos. Hablábamos en inglés, hasta que llegó un momento en que, no me acuerdo muy bien porqué pero le dije, 'No, I live in Spain' y me dice en un perfecto español... 'Y que hacemos hablando en inglés'... me sonó totalmente a chiste :D

Conforme iba avanzando me iba encontrando a grupos de corredores más numerosos. Antes de empezar la carrera una de las incógnitas era si tantas horas de noche supondrían un handicap a esas alturas de la carrera, pero lo cierto es que no fue así, tuvo un puntito muy bueno. Una puede estar rodeada de gente y sentirse tremendamente sola e incomprendida, y otras veces no haber personas alrededor y no sentir ni una pizca de soledad. Lo repito de nuevo... fue genial!

Y más genial fue cuando, ante todo pronóstico, apareció ante nosotras el avituallamiento 3. 'Cómo se dice en español... PUTA MADRE!!! no?' jajaja esas fueron las palabras de Verónica seguidas de mis gritos. Lo habíamos conseguido y llegábamos con 10 minutos de margen!!

Eran las 23:21 cuando entramos, había tardado 02:41:09 con unas pulsaciones de 145ppm de media y 168ppm de máxima. Y mantenía más o menos la Posición 1663.

Seguí tomando coca-cola y alguna galleta salada, pero poco más quería meterle al cuerpo, que aunque no saturado ya poco más quería de alimento. Es aquí donde Verónica pregunta el tema de los kilómetros y nos dicen que en la línea de salida lo habían advertido; no habían impreso nuevos carteles este año sino que habían reaprovechado los del año anterior, por eso los puntos kilométricos no coincidían. Así el kilómetro 46 realmente era el 50, el 53 era el 56 y ahora nos encontrábamos en el 73, que ese si coincidía. Nos quedaban 11 kilómetros para llegar, ya que la carrera no tenía 80, ni 82, sino casi 84 kilómetros!!... Hay que joderse.

Nada más salir del avituallamiento la vi de nuevo y le grité a Verónica 'La torre Eiffel!!!!', que subidón, ahora si que íbamos directas hacia ella. Tras una bajada en zigzag el bosque dejó paso al asfalto y en un par de kilómetros empezamos a ver civilización. Era París y había gente esperando, gente arreglada que seguramente estarían esperando a corredores conocidos y que, a falta de los mimos nos animaban a nosotras ;)

Imagina la situación: hora aprox. las 0:00, París y sábado noche ¿Qué hacía tanto colgao con mochilita al hombro corriendo por esas calles llenas de gente arreglada que iba de marcha? La verdad es que el cambio fue brutal. Una dosis de realidad en pocos segundos. Y la sensación de no pegar allí ni con cola, aunque en esos momentos eso no supone nada. Después tampoco, pero lo recuerdo así, me encontraba desubicada.

Esta parte fue la que más me costó, por cansancio y porque nos metieron por la parte más fea de toooodo París y mira que eso es difícil, eh? Me advirtió Verónica que tuviera cuidado con los coches, que allí conducían fatal. Creo que aquí fue el único momento donde empecé a venirme abajo. No me costaba bajar o subir los escalones que estábamos sorteando al seguir las balizas, sino el asfalto a esas alturas de la carrera, me estaba machacando las piernas, pero sobre todo la cabeza. Tanto es así que mi ritmo trotón decayó y empecé a andar más de la cuenta. Verónica iba mejor que yo y la dejé ir, dejé que tirara, así que en los últimos kilómetros me quedé sola. Iba encontrando corredores, algunos que ya no podían correr más. Y no recuerdo desde que punto casi todo el rato se tenía presente la Torre Eiffel, cuyo tamaño hacía adivinar que aún estaba lejos. 'Llegaré?' pensaba yo... 'Después de todo me quedaré a las puertas?'. Empecé de nuevo a correr y pasara lo que pasara no iba a dejar de hacerlo. Perdí de vista la torre o al menos no recuerdo que la tuviera presente, iba más pediente de las balizas, ya que en la ciudad es más difícil verlas. Y por más que preguntaba nadie lograba decirme por que parte de la Torre se hacía la entrada... Trocadero? Campos de Marte? Mejor era seguir corriendo, aunque no tuviera ni idea de la distancia que me quedaba y no quisiera ni mirar el reloj.

Me encontré con Miguel Ángel, iba andando. Le pregunté si quería reengancharse, pero su ernia discal no le dejaba correr. 'Tira, tira! tu aún tienes posibilidades, quedan 20 minutos para las 1:00'. Y allí fui... siguiendo el camino, que nos habia pasado por debajo de puentes donde había indigentes y pescadores; por encima de los puentes; de una orilla a otra; por el centro, corriendo por una lengua de tierra que hay, y todo esto aderezado con sus correspondientes escaleras. Concentrada en seguir las balizas y en seguir corriendo a pesar de ese cross urbano, no me di cuenta de donde estaba ya. De pronto oí más jaleo de la cuenta, vi gente que empezaba a darme la enhorabuena y animaba desde lejos, subí los escalones que llevaban de la parte más baja de la orilla del río a la parte alta y entonces alcé la vista y la vi todo lo grande que es, perfectamente iluminada, en esos momentos me sentí muy chica por fuera pero inmensa por dentro. Menudo subidón. Comencé a correr aumentando el ritmo... el semáforo se acababa de poner en rojo, si 'esprintaba' podría pasar por los dos pasos de cebra y llegar hasta la pata para empezar a subir los 364 escalones. Así lo hice y me quedé casi sin aliento, ya que seguí así durante los 200 metros hasta donde comenzaban los escalones, ante la mirada sorprendida de la gente y sus ánimos. Es curioso pero podía comprender todo perfectamente aunque lo dijeran en Francés, de hecho lo recuerdo como si lo lo hubieran dicho en español.


Lágrimas de emoción que se fueron transformando en una pedazo de sonrisa conforme más escalones subía.

Eran las 0:56 cuando pasé el control a la entrada de la pata de la Torre Eiffel y las 01:01:41 cuando pasé la meta. Había tardado 01:40:26 de los cuales 5:38 había invertido en subir por los 364 escalones que llevaban a la meta. Con unas pulsaciones de 141ppm de media y 165ppm de máxima. Y con una posición final de mantenía más o menos la Posición 1659. El consumo calórico total según el pulsómetro fue de 10.350kcal.


Con toda la emoción me olvidé de avisar o de llamar al resto que no tenían ni idea de por donde andaba yo, así que no pudieron ver mi entrada en meta jejejeje... Lo siento, sé que hubieran disfrutado de mi llegada, y a mi me hubiera encantado darles a todos un gran abrazo. Y aunque ya lo hice después desde aquí les mando otro muy muy grande. Fue todo genial.

Y hasta aquí esta estupenda experiencia en la EcoTrail, carrera en la que nunca pensé que llegaría a tiempo para cruzar la meta. La vida nos da sorpresas... sorpresas nos da la vida. Y que siga dándolas ;)


7 comentarios:

Unknown dijo...

Enhorabuena!!!

Unknown dijo...

merecio la pena esperar ...

Loleta dijo...

Me alegro que este 'ladrillo' te haya gustado, pensé por tus otros comentarios que te había dejado sin habla :D.

Todas las carreras son especiales y ésta lo ha sido mucho. Es curioso como antes de llegar me iba convenciendo de que podía hacerlo, no me salían los cálculos pero intentaba no darle importancia. Ahora que la he terminado me parece demasiado en comparación con el tiempo que llevo entrenando. La cosa cambia mucho del papel al terreno de verdad.

Tanto escribir es la forma que tengo de asentar y digerir todo lo que en esos momentos vivo y que tan rápido pasa; de disfrutarlo una segunda... o tercera vez.

Gracias.

Alfonso García Territorio Trail Media dijo...

Buena crónica Loleta!!!

Yo también participé en los 80 y tuve unas sensaciones parecidas a las tuyas, sobre todo el bajón en el observatorio cuando no me coincidían los kilómetros con la pancarta, en lo laaaaaaaaaaaargo que se hizo llegar al k56 y en lo feo del tramo urbano por París.

Lo dicho, enhorabuena, y ya siento no haber coincidido con vuestro grpo. Mira que me iba fijando en los dorsales y no vi a ningún español.

Loleta dijo...

Hola Almasy,

en primer lugar muchas gracias por leerme y también por tu comentario, siempre es un placer recibir a gente nueva por aquí ;)

Lo del km 46 supongo que echaría por tierra los ánimos de muchos. He leído tu crónica y coincidimos en muchas de las cosas que comentas, hasta en el chof chof de los calcetines, jajajaja que gracia me ha hecho.

Enhorabuena también a tí, hacer menos de 10 horas, me parece toda una proeza.

Hubiera sido un punto coincidir por allí, pero lo cierto es que había un montón de gente. Seguiré tus pasos por si coincidimos en alguna otra carrera ;)

Unknown dijo...

Enhorabuena !!

Ha sido genial compartir esa experiencia con todos nosotros.

Gracias mil

Loleta dijo...

Hola Dani! para mí ha sido una carrera muy especial y supongo que eso se transmite en la crónica.
Espero verte este finde.

Y gracias a tí!